viernes, 31 de mayo de 2013

Jardin



La calma reinaba en aquel hermoso jardín, cuando ese exquisito sonido lo envolvió todo. Todo era tan vibrante y luminoso que el placer no te permitía salir, era casi como estar hechizado, el silencio era inconcebible, la oscuridad inexistente y la soledad imposible.

De pronto hubo un cambio en el ambiente, el aire traía consigo el sonido de una carrera, alguien se acercaba. Me oculté sin darme cuenta y pude ver por fin a quien corría, una joven de largas trenzas oscuras y ojos brillantes se escondió entre los árboles, un joven la seguía.

Tras algunos segundos él la encontró, ella se lanzo a sus brazos .. ¿Bailaban? él le susurro algo al oído y se alejo rápidamente.

Cuando se quedo sola, la expresión de la chica se transformó, su mirada tenía un brillo negro, el aire se torno pesado y el jardín súbitamente quedó en silencio.

Algo sucedió pero no pude distinguir bien qué, prontamente el cielo se cerró, parecía que una tormenta se avecinaba. Me fui y no vi más a la joven esa mañana.

Al otro día regresé al jardín y vi parte del vestido de la muchacha en el mismo árbol donde se había escondido el día anterior, me acerqué a observarla, pero la sorpresa me la llevé yo. No era una hermosa joven lo que vi tras ese árbol, sino un esqueleto cubierto de hierbas y una pequeña enredadera de flores que se escurría entre sus huesos. Parecía como si llevara semanas allí, tenía una especie de diario apretado entre sus manos, lo removí con cuidado y lo leí.

Al parecer ella había esperado por mucho tiempo que el joven regresara, pero nunca volvió. Y ella se quedó allí hasta morir y su profunda pena quedó guardada en el jardín.

Quizás lo que vi fue parte de la magia encerrada en aquel jardín, su ultimo recuerdo de como su esperanza se alejaba para nunca volver.

Años después de lo sucedido aquella mañana aún me pregunto ¿qué hubiese sucedido si él hubiera regresado? ¿O si ella cansada de esperar se hubiese marchado? ¿O quizás si tan alguien hubiese podido evitarle  aquél destino?  ¿Quizás a él le impidieron regresar? pero... ¿Quién sabe?

NOTA:  Este cuento fue escrito hace bastante así que disculpen si no es de su agrado.

lunes, 20 de mayo de 2013

Sombra


Observar ese perfil, el destello en sus ojos, tan cerca y tan distante tan... inalcanzable. Tan solo encandilante, después de todo esa palabra me parece perfecta en este momento.


 Una forma vaporosa  entre la niebla, ¿ por qué he de seguirle añorando?


Cada vez que le pienso su recuerdo poco a poco se vuelve mas lejano.


Marca difusa entre los anhelos de una herida dolorosa.


Tristeza de aquellas voces que añoran algo que no dejo nunca de ser un espejismo.


Susurros entre tinieblas clamando por su nombre.


Ríos de cristales líquidos corriendo una carrera silenciosa.


Podría compararte con el más cruel de los inviernos, pero prefiero pensarte como el principio de una primavera por venir. 


Siempre he de buscar tu sombra entre la niebla, en un camino borroso e intranquilo. 


Tu recuerdo aún me embarga pero las sombras ya empiezan a cicatrizar. 






miércoles, 8 de mayo de 2013

Rostros: una razon (segunda parte)

El teléfono sonaba y sonaba ... sigue sin contestar.

Pensándolo bien probablemente este ya no sea su numero, ha pasado un tiempo desde la ultima  vez, un año quizás dos. Jamas debí desaparecer así, al menos debería haberle dicho adiós.

¿En que estoy pensando? Ella ya no esta ahí, sin importar nada solo me fui y no mire atrás, hasta este momento.

Realmente necesitaba alejarme de todo, nos heríamos mutuamente. Aquel  día fue como cualquier otro excepto por ese pequeño detalle, ese  diminuto detalle que llevo todo a su fin: dijiste sin mas que me odiabas. ¿Quién dice las cosas de esa manera? ¿Que clase de persona dice que odia a otro como si no significara nada?
Ya era suficiente, en ese instante fue como si mi cuerpo se moviera solo, tome mis cosas y me fui. Quizás tendría que haberme calmado antes de tomar una decisión, pero no lo hice y ya no puedo hacer nada para cambiarlo...

-  ¿Hola? ¿hola?...

Finalmente habían contestado, y ¿ahora qué hago ? no había pensado en que decir si contestaban ¿Qué hago?

- Hola, disculpame ...  ¿ Amelia se encuentra en casa?
- Hace mucho que ya no vive aquí, ¿quien habla?
-Su ex se podría decir.
-Dejo algunas cosas por si las queres.
-¿No te molesta si paso a buscarlas? ...  ok muchas gracias paso mañana.

Una caja, una historia entre cartón. Me sorprendió el ver que todavía guardabas esas cosas: un álbum, una servilleta, unas piedras y esa carta.
Esa condenada carta que convirtió mi vida en esto,  pensar que mi mayor preocupación era como comenzarla..
 ¿Querida, Adorada mía? o ¿Simplemente ... Endiablada  Amelia?